Por: Filiberto Cruz Monroy La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México nunca ha sido un espacio digno para que una mujer trabaje. Eso se sabe en pasillos, oficinas y cafeterías de empleados que, entre el chisme y la frustración, repiten lo mismo: discriminación, acoso, humillaciones, instalaciones que parecen sacadas de un set …