Gisèle Pelicot, la mujer de 72 años que se convirtió en ícono global de la lucha contra la violencia de género tras impulsar un histórico macrojuicio por violación en 2024, será condecorada este 14 de julio con la Legión de Honor durante las celebraciones de la Fiesta Nacional de Francia. El anuncio oficial publicado en el Diario Oficial reveló que recibirá el grado “Chevalier” (Caballero), la primera de las tres distinciones de esta orden creada por Napoleón Bonaparte en 1802.
Pelicot saltó a la fama mundial cuando decidió llevar a juicio público a su exmarido Dominique Pelicot junto a otros 50 acusados, rompiendo el anonimato que usualmente protege a víctimas de violencia sexual. Durante el proceso judicial, que se desarrolló a puertas abiertas por su solicitud expresa, se reveló cómo fue drogada y violada sistemáticamente durante casi una década por su exesposo y decenas de cómplices.

El impacto del caso trascendió las fronteras francesas cuando la revista Time incluyó a Pelicot en su lista de mujeres más influyentes de 2025. Su valentía no solo llevó a la condena de 20 años de prisión para su agresor, sino que generó reformas legales en la legislación francesa sobre violencia sexual. Miles de feministas en todo el mundo se movilizaron para apoyarla durante el juicio, convirtiendo su caso en símbolo de la lucha global contra la impunidad de los crímenes machistas.
El presidente Emmanuel Macron destacó que la “valentía y dignidad” de Pelicot conmovieron profundamente a Francia y al mundo entero. La distinción que recibirá este 14 de julio -aniversario de la Toma de la Bastilla que inició la Revolución Francesa en 1789- reconoce a quienes han “consagrado su vida al interés general”, según los estatutos originales de la orden.
Entre los 589 condecorados este año se encuentra también el diseñador Pharrell Williams, director creativo de Louis Vuitton desde 2023, aunque sin duda el caso de Pelicot destaca por su trascendencia social. Su lucha personal se transformó en un movimiento colectivo que inspiró cambios legislativos y visibilizó como nunca antes en Francia la gravedad de las violencias sexuales sistémicas.
La Legión de Honor, máxima condecoración francesa, adquiere especial significado en este caso al premiar no logros militares o artísticos, sino el coraje civil de una mujer que desafió tabúes sociales y mecanismos de impunidad. Pelicot declaró durante el juicio que su objetivo nunca fue solo obtener justicia personal, sino “evitar que otras mujeres vivan lo mismo”.