El presidente Donald Trump reconoció que la mandataria mexicana Claudia Sheinbaum ha incrementado la cooperación bilateral para desmantelar a los cárteles de drogas, pero advirtió que México “tiene mucho por hacer” y deberá mostrar “esfuerzos adicionales” durante 2026 para cortar las cadenas de suministro de fentanilo hacia territorio estadounidense o enfrentará “graves consecuencias”. En una determinación presidencial presentada ante el Congreso de Estados Unidos, Trump detalló los avances del gobierno mexicano mientras estableció plazos concretos para esperar resultados más contundentes contra el narcotráfico.
El documento del Departamento de Estado, que identifica a los principales países de tránsito o producción ilícita de drogas para el año fiscal 2026, incluye a México entre 23 naciones que deben tomar medidas más enérgicas para impedir que el fentanilo y otras sustancias lleguen a Estados Unidos. Trump reconoció específicamente las acciones del gobierno de Sheinbaum para blindar la frontera, reforzar operativos de incautación y facilitar extradiciones: “En México, la presidenta Claudia Sheinbaum ha incrementado la cooperación para enfrentar a los poderosos cárteles que contaminan nuestros países con drogas y violencia”.

El mandatario estadounidense citó logros concretos de la cooperación bilateral: “México ha desplegado 10 mil efectivos de la Guardia Nacional en nuestra frontera común, ha logrado importantes incautaciones de fentanilo y precursores químicos y ha transferido a 29 objetivos de alto valor, incluyendo importantes figuras de los cárteles, a la custodia de Estados Unidos para que sean juzgados por sus delitos”. Agregó que su administración “ha trabajado estrechamente con la presidenta Sheinbaum para lograr la frontera suroeste más segura de la historia, salvando vidas y protegiendo a las comunidades del flagelo del fentanilo”.
Sin embargo, Trump advirtió que estos esfuerzos deben ser “sostenidos e institucionalizados”, señalando que “el gobierno mexicano aún tiene mucho por hacer” para combatir específicamente a líderes de cárteles, laboratorios clandestinos, cadenas de suministro de precursores químicos y finanzas ilícitas. El documento establece expectativas claras para el próximo año: “Durante el próximo año, Estados Unidos espera ver esfuerzos adicionales y enérgicos por parte de México para exigir responsabilidades a los líderes de los cárteles y desmantelar las redes ilícitas dedicadas a la producción y el tráfico de drogas”.
La advertencia final incluye language de consecuencias: “Estados Unidos colaborará con México y otros países para abordar estas amenazas a la seguridad nacional de manera cooperativa, siempre que sea posible, y a través de nuestras propias autoridades soberanas cuando sea necesario”. Trump recordó que su decisión de clasificar a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas extranjeras “abrió nuevas facultades para que Estados Unidos desmantele estos grupos mediante sanciones, mayor capacidad de procesamiento y otros recursos”, incluyendo restricciones de visas para familiares de narcotraficantes. El mensaje concluye con un ultimátum claro: instará a los países productores y de tránsito “a que cumplan con sus obligaciones y corten estos suministros, o enfrentarán graves consecuencias”.