El presidente Donald Trump emitió este domingo una publicación en Truth Social en la que plantea un ultimátum a Hamás para aceptar un acuerdo de paz con condiciones severas antes de las 18:00 horas tiempo de Washington, D.C. (1:00 de la mañana del lunes en Tel Aviv), advirtiendo que de no cumplirse “se desatará un infierno como nunca antes se ha visto contra Hamás”. En su mensaje, el mandatario estadounidense aseguró que más de “25 mil ‘soldados’ de Hamás ya han sido asesinados” como represalia al ataque del 7 de octubre y afirmó estar preparado para ordenar que los restantes sean perseguidos y eliminados, declarando que “sabemos dónde están y quiénes son, y serán perseguidos y asesinados”.
Como respaldo diplomático a su ultimátum, Trump indicó que “las grandes, poderosas y ricas naciones de Oriente Medio … junto con Estados Unidos, han acordado, con la firma de Israel, la paz en Oriente Medio, después de 3 mil años”. El presidente aseguró que este pacto histórico “perdona la vida de todos los combatientes restantes de Hamás” que acepten sus términos, ofreciendo así una salida negociada al conflicto que lleva casi dos años de duración. Esta referencia sugiere la existencia de acuerdos diplomáticos previamente no revelados con naciones árabes de la región que respaldarían el plan estadounidense.

Trump instó adicionalmente a los civiles palestinos a evacuar zonas consideradas de “potencial muerte futura”, dirigiendo un mensaje directo a la población civil: “todos los palestinos inocentes abandonen inmediatamente esta zona … Todos serán bien atendidos por quienes esperan ayudar”. Esta advertencia representa una de las declaraciones más directas del mandatario sobre la necesidad de evacuaciones civiles preventivas ante una posible escalada militar de proporciones significativas si Hamás rechaza el acuerdo de paz propuesto.
El presidente reiteró que “la violencia y el derramamiento de sangre cesarán… de una forma u otra tendremos paz en Oriente Medio”, enfatizando su determinación de poner fin al conflicto mediante either la aceptación del acuerdo negociado o through acciones militares decisivas. La declaración refleja la postura de línea dura que Trump ha mantenido hacia Hamás desde el inicio de su administración, combinando amenazas militares explícitas con ofertas de acuerdos de paz bajo sus términos.
El ultimátum establece un punto de inflexión en el conflicto entre Israel y Hamás, que ha causado decenas de miles de víctimas palestinas según cifras de salud gazatíes y organizaciones internacionales. La referencia específica a las 18:00 horas del domingo tiempo de Washington crea un plazo perentorio para que la organización militante palestina tome una decisión que podría determinar el curso futuro del conflicto y las operaciones militares en la Franja de Gaza.
La mención de Trump sobre el respaldo de “naciones de Oriente Medio” al acuerdo sugiere posibles avances diplomáticos detrás de escena con países árabes que tradicionalmente han mostrado apoyo a la causa palestina, aunque el mandatario no especificó qué naciones concretas forman parte de este entendimiento. La ambigüedad calculada deja espacio para la especulación sobre posibles cambios en las alianzas regionales en torno al conflicto palestino-israelí.