La presidenta Claudia Sheinbaum informó que su gobierno sostendrá la próxima semana una conversación con autoridades de China luego del anuncio de incrementos de hasta 50% en aranceles a vehículos ligeros provenientes de países asiáticos sin tratado de libre comercio con México. La mandataria aseguró que estas medidas no representan actos de coerción ni discriminación contra China, sino que forman parte del “Plan México” para fortalecer la economía y producción nacional.
Desde Palacio Nacional, Sheinbaum explicó: “No son decisiones contra China, eso es muy importante, no son contra un país. Nosotros tenemos muy buena relación con ellos y queremos seguir así. Son medidas que tomamos para todos los países con los que no tenemos acuerdo de libre comercio”. La presidenta reveló que Corea del Sur también se acercó a la Cancillería mexicana para iniciar pláticas, destacando que su gobierno siempre estará abierto al diálogo.

El canciller Juan Ramón de la Fuente descartó cualquier posibilidad de ruptura en las relaciones con China, calificando la relación como “muy cordial y amistosa”. Informó que se han mantenido reuniones de trabajo con el embajador chino Chen Daojiang en las últimas semanas para explicar los alcances del Plan México y las nuevas oportunidades comerciales. De la Fuente emphasized que México está revisando sus esquemas de comercio con todos los países sin TLC conforme a los principios de la Organización Mundial de Comercio.
La medida arancelaria afectaría principalmente a vehículos eléctricos e híbridos de marcas chinas como BYD y JAC, elevando la tarifa actual del 20% al 50% para países sin tratado comercial. El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, justificó la decisión argumentando que “los precios de los autos que llegan a México están por debajo de lo que llamamos precio de referencia”, protegiendo así a la industria automotriz nacional de prácticas desleales de comercio.

El gobierno chino, through su portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores Lin Jian, había acusado previamente a México de “coerción”, afirmando que Pekín “se opone firmemente a cualquier coerción de otros para imponer restricciones a China bajo distintos pretextos”. Sin embargo, las autoridades mexicanas mantienen que la medida se aplica de manera uniforme a todos los países sin TLC y no viola ninguna norma internacional.
Paralelamente, el canciller De la Fuente confirmó que la presidenta Sheinbaum se reunirá el 18 de septiembre con el primer ministro de Canadá, Mark Carney, para abordar temas principalmente económicos y comerciales, reafirmando el compromiso de México con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte que ha beneficiado a los tres países de la región.