La presidenta Claudia Sheinbaum denunció este martes que la alcaldesa de Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega, cometió una irregularidad al ordenar el retiro de las estatuas de Ernesto “Che” Guevara y Fidel Castro sin la autorización del Comité de Monumentos y Obras Artísticas en Espacios Públicos (COMAEP). La mandataria enfatizó que todo patrimonio artístico requiere evaluación técnica antes de su reubicación, recordando el proceso seguido durante su gestión como jefa de Gobierno capitalino con el monumento a Cristóbal Colón.
“El patrimonio no se subasta, es una legalidad. Primero debió solicitar permiso al comité para remover las esculturas, luego entregarlas, y serían las instituciones culturales quienes decidirían su nueva ubicación”, explicó Sheinbaum durante su conferencia matutina. La presidenta contrastó este caso con el de la estatua de Colón, que en 2020 fue retirada de Paseo de la Reforma para restauración y finalmente reubicada en el Parque América tras consultas con comunidades indígenas, dando paso a la instalación de “La Joven de Amajac”.
Por su parte, la jefa de Gobierno capitalina, Clara Brugada, confirmó que la alcaldía Cuauhtémoc carece de facultades para enajenar bienes patrimoniales y anunció gestiones para recuperar los monumentos. Las declaraciones oficiales responden a la polémica generada tras la desaparición de las esculturas de los líderes cubanos, cuyo paradero actual se desconoce públicamente.
Este episodio reactiva el debate sobre la gestión del espacio público y la simbología política en la capital mexicana, donde en los últimos años se han reconfigurado diversos monumentos históricos. El COMAEP, órgano técnico dependiente del Gobierno de la Ciudad de México, es la instancia facultada para autorizar modificaciones al patrimonio artístico en espacios públicos según lo establece la Ley de Salvaguarda del Patrimonio Urbanístico Arquitectónico.
Hasta el momento, la alcaldía Cuauhtémoc no ha emitido un posicionamiento oficial detallando los motivos del retiro de las estatuas ni los procedimientos seguidos para esta acción. Expertos en derecho urbanístico consultados coinciden en que toda intervención en monumentos públicos requiere sustento técnico y cumplimiento de protocolos administrativos, independientemente de consideraciones ideológicas sobre las figuras representadas.
