La alcaldesa de la Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega, ha establecido una alianza con el Consejo Nacional de Nueva Derecha, un grupo de derecha conservadora, para obtener apoyo para la marcha de “resistencia democrática” que convocó para el 31 de agosto. Raúl Tortolero, presidente de dicha organización, confirmó que su respaldo no es gratuito y está condicionado a que la edil deje de portar el pañuelo verde, símbolo de la despenalización del aborto, una de las causas que ha defendido públicamente.
El acercamiento se concretó en una reunión celebrada el 19 de agosto en las instalaciones de la alcaldía, donde se presentaron estas condiciones como innegociables. La marcha, promovida activamente por Rojo de la Vega en sus redes sociales desde el pasado 4 de junio, tiene como consigna individual “No les voy a fallar”.
El acuerdo implica que la movilización debe mantenerse libre de símbolos políticos, sindicales o banderas vinculadas a movimientos como el feminismo o la comunidad LGBTQ+, que este grupo conservador califica de “supremacismo”. De manera sutil, la alcaldesa parece haber respondido a estas peticiones.
La noche del domingo 24 de agosto publicó un video en la red social X promocionando la marcha y precisando: “Ven de blanco, con tu familia, con tu gente, trae la bandera que nos une a todas y a todos, nuestra bandera mexicana”. Desde la perspectiva de Tortolero, con esta indicación la aliancista marcó distancia con causas como el aborto y los derechos de la comunidad LGBTQ+ dentro de la convocatoria del movimiento opositor que pretende encabezar.

Estos acercamientos contrastan con el activismo previo de Rojo de la Vega, base de su popularidad en redes sociales y de su carrera política. Ella misma se ha declarado aliada de la comunidad LGBTQ+ y durante su administración echó a andar programas para beneficiar a este sector, como el “Apoyo económico para la atención en materia de salud de las personas transexuales, transgénero e intersexuales”, publicado en la Gaceta Oficial en febrero.
Además, se identifica abiertamente con la Marea Verde por la despenalización del aborto y el feminismo, movimiento que colocó en el centro de su perfil político. Durante su campaña electoral nunca se retiró el pañuelo morado que acostumbraba poner en alto al final de sus discursos.
En el Consejo de Nueva Derecha reconocen el pañuelo morado como un distintivo personal de la funcionaria y aceptan que no se deslindará completamente del movimiento feminista. No obstante, Raúl Tortolero precisó que sí buscan que “matice” su feminismo, aclarando que sea “por amor a las mujeres, pero no es contra los hombres”. El presidente de la organización también destacó que Rojo de la Vega se formó en la Universidad Iberoamericana con una educación jesuita, por lo que considera que comparte con ellos valores cristianos que refuerzan su vínculo simbólico.

El primer acercamiento de la alcaldesa con los conservadores ocurrió el 28 de mayo afuera de la parroquia de la Sagrada Familia, en la colonia Roma, donde realizaron una oración para que defendiera los valores cristianos. En este encuentro participaron personas que, un mes después, fundarían el Consejo de Nueva Derecha.
Además de estos encuentros, Tortolero señaló que el retiro de las esculturas de Fidel Castro y Ernesto Guevara en el jardín Tabacalera, llevado a cabo por la alcaldesa el pasado 16 de julio, representó un acercamiento tanto al centro como a la derecha política. Subrayó que esta acción tuvo un fuerte peso simbólico, constituyendo una declaración de principios que “no tiene marcha atrás” y consolidando su postura frente a ideologías de izquierda en la ciudad. El video de la convocatoria a la marcha alcanzó 1.3 millones de vistas y generó 3 mil 400 reacciones en la red social X.