El Reino Unido, Australia y Canadá reconocieron formalmente al Estado palestino el domingo 21 de septiembre de 2025, lo que generó una respuesta inmediata de rechazo por parte del gobierno israelí. Ese mismo día, Portugal también anunció su decisión de sumarse al reconocimiento desde la sede de su misión en Naciones Unidas en Nueva York. La iniciativa conjunta de los cuatro países refleja una creciente presión internacional sobre Israel en medio de la guerra en Gaza y la expansión de asentamientos en Cisjordania.
El anuncio fue encabezado por el primer ministro británico Keir Starmer, quien afirmó en un mensaje de video que el reconocimiento busca “revivir la esperanza de paz para los palestinos e israelíes”. Starmer subrayó que la decisión no representa una recompensa para Hamás, el grupo que perpetró los ataques del 7 de octubre de 2023 en Israel, en los que murieron unas 1.200 personas y 251 fueron secuestradas.
En Canadá y Australia, los gobiernos comunicaron de manera simultánea su adhesión a la medida, mientras que en Lisboa, el canciller Paulo Rangel oficializó la posición portuguesa, destacando que la decisión fue aprobada por unanimidad en el Consejo de Ministros tras consultas con los partidos políticos y el presidente Marcelo Rebelo de Sousa.

Reacciones en Israel y Palestina
El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu respondió con firmeza al anuncio, asegurando que el establecimiento de un Estado palestino “no sucederá” y calificó la medida como un “premio” para Hamás. Netanyahu advirtió que su gobierno podría tomar medidas unilaterales, incluida la anexión de partes de Cisjordania, lo que aumentaría la tensión con la comunidad internacional.
Hamás celebró el reconocimiento, considerándolo un “resultado legítimo de la lucha y sacrificios del pueblo palestino”. El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, también destacó que la decisión del Reino Unido constituye un paso importante hacia una “paz justa y duradera basada en la solución de dos Estados”.
Anticipación y contexto internacional
El anuncio británico había sido anticipado desde julio, cuando Starmer declaró que Londres reconocería a Palestina si Israel no aceptaba un alto al fuego en Gaza ni permitía el ingreso de ayuda humanitaria. La medida abre la puerta a que más países europeos se sumen al reconocimiento durante la Asamblea General de la ONU de esta semana, entre ellos Francia y Portugal, que finalmente hizo pública su decisión el mismo domingo.
La declaración portuguesa fue realizada por Rangel desde la representación permanente en Naciones Unidas. Subrayó que la postura de su país se ajusta a tres condiciones previamente fijadas: que la Autoridad Nacional Palestina asuma reformas y condene el terrorismo, que los países árabes que aún no reconocen a Israel lo hagan, y que un grupo de Estados occidentales adopte la decisión de manera coordinada.
Significado histórico
El reconocimiento tiene una fuerte carga simbólica en países como el Reino Unido y Francia, cuya participación en la configuración del mapa de Oriente Medio tras la Primera Guerra Mundial dejó una huella duradera. En particular, la Declaración Balfour de 1917 británica apoyó la creación de un “hogar nacional para el pueblo judío”, pero omitió garantizar los derechos del pueblo palestino.
Husam Zomlot, jefe de misión palestina en Londres, declaró que el reconocimiento corrige un error histórico de la era colonial y representa el fin de más de un siglo de negación de la existencia del pueblo palestino.
Perspectiva diplomática
Aunque el reconocimiento de Palestina por parte de Reino Unido, Australia, Canadá y Portugal representa un giro diplomático significativo, analistas internacionales advierten que su impacto inmediato será limitado si Estados Unidos no adopta una posición similar. Aun así, los expertos destacan que la decisión mantiene viva la perspectiva de una solución de dos Estados en medio de un conflicto que ha dejado más de 65.000 muertos en Gaza y ha desplazado al 90% de la población del enclave en casi dos años de guerra.
El gobierno portugués reafirmó que, junto al reconocimiento de Palestina, mantiene su condena a los ataques del 7 de octubre de 2023 y defiende el derecho de Israel a garantizar su seguridad. Rangel subrayó que el reconocimiento se enmarca en los principios de Naciones Unidas y en la necesidad urgente de alcanzar un alto al fuego y facilitar la entrada de ayuda humanitaria en Gaza.
La decisión de los cuatro países se anunció en vísperas de una conferencia internacional sobre la solución de dos Estados, convocada para el lunes en la Asamblea General de la ONU en Nueva York, donde se espera que otras naciones se pronuncien en la misma dirección.