Agentes federales realizaron una serie de redadas migratorias en la ciudad de Ventura, California, que derivaron en violentos enfrentamientos con grupos defensores de derechos de migrantes. Según testigos y videos difundidos en redes sociales, una docena de agentes utilizaron munición “menos letal” contra cerca de 500 manifestantes que se congregaron cerca de la intersección de las calles Laguna y Wood, en protesta por las detenciones.
El operativo se concentró en dos ubicaciones específicas en la cuadra 600 de Laguna Road, donde según reportes del Los Angeles Times, los agentes ingresaron a un almacén y detuvieron a todos los trabajadores presentes. Una integrante de la organización “805 Immigration Coalition” declaró al medio que entre los detenidos podrían encontrarse ciudadanos estadounidenses, aunque esto no ha sido confirmado por las autoridades.
“Todos los que trabajaban en el almacén fueron arrestados. Es una fábrica enorme y muchos residentes de la zona tienen familiares que trabajan aquí; por eso hay tanta presencia ahora mismo”, explicó la activista. Las imágenes compartidas por la coalición en Instagram muestran a manifestantes tosiendo por el gas lacrimógeno y protegiéndose de las rondas de munición ligera disparadas por los agentes.

La protesta surgió de manera espontánea cuando vecinos y familiares de los trabajadores detenidos comenzaron a congregarse en el lugar. Los organizadores de la “805 Immigration Coalition”, un grupo de voluntarios que monitorea operativos migratorios en la región, documentaron en tiempo real el uso de fuerza por parte de las autoridades.
En declaraciones a los medios locales, los manifestantes acusaron a los agentes de realizar detenciones indiscriminadas y de emplear tácticas intimidatorias contra quienes intentaban grabar los procedimientos. Hasta el momento, las autoridades federales no han emitido un comunicado oficial detallando el número de personas arrestadas o los cargos imputados.
Este incidente se suma a una serie de enfrentamientos entre grupos proinmigrantes y autoridades federales en California, estado que ha adoptado políticas de “santuario” para limitar la cooperación con las agencias de inmigración. Organizaciones civiles han denunciado un incremento en la frecuencia de redadas en zonas agrícolas y urbanas con alta población migrante.
Mientras las investigaciones avanzan, la “805 Immigration Coalition” anunció que brindará asistencia legal a los afectados y continuará documentando posibles abusos. El caso ha reavivado el debate sobre el uso de fuerza en operativos migratorios y los derechos de las comunidades vulnerables.