Pipa de gas circulaba a exceso de velocidad; suman 8 muertos

La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) informó que de acuerdo con información preliminar, la pipa de gas LP que volcó y estalló el miércoles 10 de septiembre en el Puente de la Concordia, Iztapalapa, era conducida a exceso de velocidad al momento del accidente. El chofer de la unidad se encuentra bajo custodia médica en un hospital, donde su estado de salud se reporta como crítico, aunque aún no está formalmente detenido mientras continúan las investigaciones.

Las autoridades señalaron que están por concluir los primeros peritajes en el lugar de los hechos, donde trabajan especialistas en criminalística, química, incendios, explosiones y tránsito terrestre. Myriam Urzúa, secretaria de Gestión de Riesgos y Protección Civil, confirmó que la explosión afectó 29 vehículos: 20 compactos, siete transportes pesados y dos motocicletas. Todos los vehículos siniestrados fueron trasladados a un depósito para su inspección como parte de la investigación de los delitos de homicidio y lesiones culposas, así como daños a la propiedad.

Urzúa aseguró que desde el día del incidente se realizó la revisión estructural del Puente de la Concordia, determinando que “no existe ningún riesgo, pues afortunadamente no afectó a las columnas”. La titular de Protección Civil añadió que se está trabajando con los dueños de los vehículos afectados para ayudarlos con las reparaciones correspondientes. La FGJCDMX habilitó el teléfono 55 53 45 50 00 para atender dudas sobre el proceso de devolución de vehículos, que se realizará una vez concluidas las indagatorias.

El último parte oficial, proporcionado este jueves en conferencia de prensa por la jefa de Gobierno Clara Brugada Molina, detalló que el saldo del incidente ascendió a ocho personas fallecidas (siete hombres y una mujer) y múltiples lesionados. Las autoridades investigan si el exceso de velocidad fue la causa principal del volcamiento de la pipa cargada con gas LP, que provocó la cadena de eventos culminando en la explosión. Los peritajes en curso determinarán las responsabilidades penales y civiles correspondientes, así como los mecanismos de reparación del daño para las víctimas y sus familias.

Foto internet

La FGJCDMX mantiene bajo resguardo la evidencia recolectada en el lugar de los hechos, incluídos los restos de la pipa siniestrada y los vehículos afectados, para realizar los análisis técnicos necesarios que reconstruyan las circunstancias exactas del accidente. El chofer permanecerá bajo custodia médica hasta que su estado de salud permita continuar con las diligencias correspondientes dentro de la investigación ministerial abierta por el hecho.

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Filiberto Cruz

Filiberto Cruz