Luego de varios meses de negociación, Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, llegó a un acuerdo con los fiscales de Estados Unidos donde se declarará culpable a cambio de evitar un juicio donde se le podría imponer cadena perpetua.
En los registros de la corte del distrito norte de Illinois hacia la jueza Sharon Coleman, se detalla que en el caso de Ovidio Guzmán se fijó una audiencia de cambio de declaración de culpabilidad fechada para el próximo 9 de julio, donde probablemente por sugerencia de los fiscales y como parte de las negociaciones, se le dictará una condena reducida con algunos beneficios, que impliquen testificar en otros procesos de la corte.
Recordar que este acuerdo entre Estados Unidos y Ovidio, se da luego de que el otro hijo del “Chapo”, Joaquín Guzmán López, entregó a Ismael “El Mayo” Zambada a agentes federales estadounidenses, lo que fue posiblemente una señal de que los hijos de Joaquín Guzmán Loera están dispuestos a negociar con las autoridades estadounidenses.
Las detenciones de “El Ratón”
El 17 de octubre de 2019, mejor conocido como el Jueves Negro o El Culiacanazo, el “Ratón” fue detenido por miembros de las Fuerzas Armadas de México, luego de un operativo en la ciudad de Culiacán.
Esta detención movilizó a diversos grupos criminales en el estado de Sinaloa, quienes desataron diversos bloqueos, incendios y enfrentamientos armados que convirtieron Culiacanazo y sus alrededores en un auténtico campo de guerra, lo que obligo a las autoridades a liberar al capo para “evitar una masacre”, según versiones de las autoridades mexicanas.
Fue hasta enero del 2023 cuando Ovidio fue detenido de nuevo y extraditado en septiembre para enfrentar cargos de narcotráfico en un tribunal federal de Chicago. Desde entonces el hijo del “Chapo” Guzmán ha estado negociando con las autoridades para reducir su sentencia.
Los cargos contra Ovidio
Con base en el acta de procesamiento en contra de Ovidio Guzmán López, al “Ratón” se le acusa de ser un “coordinador logístico” del Cártel de Sinaloa, que implicaba operar y supervisar grandes cargamentos de cocaína, heroína, metanfetaminas y marihuana a suelo americano; también se le señala de operar transacciones financieras ilícitas y lavado de dinero.
