Por: CI
El youtuber más famoso del planeta lo volvió a hacer. Jimmy Donaldson, mejor conocido como MrBeast, acaba de alcanzar una cifra que suena más a censo nacional que a número de seguidores: ¡400 millones de suscriptores!
Sí, leíste bien. Cuatro. Cientos. De. Millones. Eso equivale a toda la población de países como Estados Unidos (340 millones) + Canadá (40 millones) + Argentina (46 millones)… ¡y todavía sobra gente!
Para ponerlo en perspectiva:
• África entera tiene cerca de 1,400 millones de personas. MrBeast ya tiene casi 1/3 de ese total.
• Toda América Latina ronda los 650 millones de habitantes. Eso significa que más de la mitad del continente latinoamericano podría ser fan del youtuber.
• Y si MrBeast fuera un país, estaría en el top 3 de los más poblados del mundo, solo por debajo de India (1,400 millones) y China (1,400 millones), y justo por encima de Estados Unidos.
Según datos de Statista, YouTube cuenta con más de 2.7 mil millones de usuarios activos mensuales en todo el mundo, siendo la segunda red social más usada después de Facebook. En promedio, cada usuario de YouTube pasa unas 23.7 horas al mes viendo contenido en la plataforma. Y en ese mar de creadores, MrBeast se ha convertido en el rey indiscutible.
Con sus retos millonarios, donaciones masivas, y su obsesión por romper récords, MrBeast no solo está ganando suscriptores: está construyendo un imperio digital más grande que la población de casi cualquier país. Y todo empezó con un joven que grababa videos en su cuarto.
Lo que distingue a MrBeast no es solo su alcance, sino el nivel de producción y la magnitud de sus ideas: desde regalar casas y autos, hasta recrear juegos de televisión a escala real. Es entretenimiento XXL para una audiencia global.
Mientras muchos influencers pelean por sus primeros 100 mil seguidores, MrBeast ya está en otra liga… una que se mide en cientos de millones y donde la audiencia global no es un sueño, sino una realidad.
¿Hasta dónde llegará? Con este ritmo, tal vez la próxima cifra que rompa no sea un récord de YouTube, sino el de la humanidad entera.
