Francia y Arabia Saudita copresidirán una cumbre a nivel de jefes de Estado y Gobierno con el objetivo de revitalizar la solución de “dos Estados” para el conflicto palestino-israelí, según confirmaron fuentes diplomáticas este jueves. La conferencia, originalmente programada para junio pero pospuesta por el conflicto entre Israel e Irán, tendrá como antecedente una reunión ministerial en Nueva York los días 28 y 29 de julio.
La iniciativa busca movilizar a la comunidad internacional en un momento donde 142 países ya reconocen al Estado palestino, aunque potencias occidentales como Estados Unidos e Israel mantienen su oposición.
En una carta dirigida al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás, el mandatario francés Emmanuel Macron explicó que el objetivo es “construir por fin el Estado de Palestina” bajo condiciones que incluirían su desmilitarización y el reconocimiento pleno de Israel.
El líder galo enfatizó que Francia busca “aportar una contribución clave a la paz en Oriente Medio” movilizando a aliados internacionales. Esta postura marca un giro en la diplomacia francesa, tradicionalmente más cautelosa que otros países europeos en el reconocimiento unilateral palestino.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, reiteró la postura de su gobierno en declaraciones al New York Times: “El reconocimiento unilateral no conducirá a la paz”. Esta posición se basa en el argumento de que cualquier solución debe surgir de negociaciones directas entre las partes, además de considerar que Palestina no cumpliría plenamente con los criterios de Estado según la Convención de Montevideo de 1933, particularmente en lo referente a gobierno efectivo y fronteras definidas.

La división política entre la Autoridad Palestina en Cisjordania y Hamás en Gaza, junto a disputas sobre el estatus de Jerusalén y las fronteras definitivas, complican el panorama. Analistas del Consejo de Relaciones Exteriores (CFR) señalan que estas fracturas internas han sido históricamente aprovechadas por Israel para cuestionar la viabilidad de un Estado palestino unificado.
La cumbre ocurre en un contexto de creciente presión internacional tras más de ocho meses de conflicto en Gaza, con cifras de víctimas que superan los 57,000 palestinos muertos según reportes locales. Países como Noruega, Irlanda y España reconocieron recientemente al Estado palestino, generando represalias diplomáticas israelíes que incluyeron el retorno de embajadores para consultas.
Expertos consultados coinciden en que la conferencia franco-saudí representa un intento por recuperar el impulso diplomático tras años de estancamiento en el proceso de paz. Sin embargo, advierten que sin la participación activa de Estados Unidos -principal aliado de Israel- y el consenso de las facciones palestinas, las probabilidades de avances concretos siguen siendo limitadas. Las próximas semanas, con la reunión ministerial en Nueva York, ofrecerán mayores señales sobre el alcance real de esta iniciativa.