La Fiscalía General de la República (FGR) informó que existe una “sólida probabilidad” de que el asesinato del fiscal federal Ernesto Cuitláhuac Vásquez Reyna en Reynosa esté relacionado con el crimen organizado, posiblemente como represalia por los recientes decomisos de más de 1.8 millones de litros de combustible robado en la región. El funcionario fue asesinado ayer por la tarde en un ataque que las autoridades calificaron de “brutal”, lo que llevó a iniciar una investigación federal con apoyo de todo el Gabinete de Seguridad.
Según la FGR, la hipótesis principal conecta el crimen con los operativos conjuntos realizados a finales de julio, donde se incautaron tractocamiones, tanques de almacenamiento y equipo utilizado para el robo de hidrocarburos. Sin embargo, la dependencia aclaró que no descarta otras líneas de investigación y mantendrá informada a la familia de la víctima sobre los avances. El fiscal Vásquez Reyna coordinaba casos estratégicos en Tamaulipas, estado que enfrenta una guerra entre cárteles por el control de rutas de combustible y narcotráfico.
Los decomisos mencionados por la FGR ocurrieron durante operativos liderados por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en municipios clave para el huachicol, como Ciudad Victoria y Matamoros. Además del combustible, se aseguraron 12 motobombas, 39 tanques móviles y maquinaria industrial, golpeando directamente a las finanzas de grupos criminales. Analistas de seguridad señalan que el asesinato del fiscal podría ser un mensaje para intimidar a las autoridades, en un estado donde los ataques contra funcionarios han aumentado un 40% en 2025 según datos oficiales.
La FGR no ha proporcionado detalles sobre las circunstancias exactas del ataque ni si hubo escoltas afectados, pero confirmó que peritos trabajan en el lugar para recabar evidencias. Vecinos de la zona reportaron hearing disparos de alto poder y una posterior explosión, aunque esto no ha sido confirmado oficialmente.

El gobierno federal anunció el reforzamiento de seguridad para fiscales en Tamaulipas y estados aledaños, mientras organizaciones civiles exigieron protección para familias de funcionarios. La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emitió un pronunciamiento pidiendo “justicia expedita” y medidas para evitar represalias contra colegas de la víctima.
Mientras tanto, la Sedena y la Guardia Nacional mantienen operativos en carreteras de Tamaulipas para localizar a los responsables. Ernesto Cuitláhuac Vásquez Reyna tenía 15 años de servicio en el Ministerio Público Federal. El gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, declaró tres días de luto oficial.