Detienen a presunto autor intelectual de asesinato de empresario limonero

Un operativo derivó en la detención del presunto autor intelectual del asesinato del presidente de la Asociación de Citricultores del Valle de Apatzingán, Michoacán, Bernardo Bravo, hallado muerto este lunes en el interior de su vehículo. En la captura participaron elementos de Defensa, junto con SSPC, Marina, FGR, GN y la Fiscalía Estatal, quienes aprehendieron al hombre identificado como Rigoberto López Mendoza, alias “El Plátano”, quien de acuerdo con reportes de seguridad estaba a cargo del cobro de piso para la organización ‘Los Blancos de Troya’.

El hombre fue identificado como Rigoberto López Mendoza, alias “El Plátano” quien, de acuerdo con reportes de seguridad, estaba a cargo del cobro de piso para la organización ‘Los Blancos de Troya’, la cual lidera César Sepúlveda, alias El Bótox, quien funge como brazo armado de Los Viagra. Originario de Aguililla, municipio de Tierra Caliente, “El Plátano” tenía entre sus pertenencias una credencial presuntamente de afiliado a la ACVA, según informaron fuentes oficiales que participaron en el operativo de captura.

Dentro del operativo hubo otros detenidos, quienes fueron trasladados a la ciudad de Morelia. Estos arrestos adicionales forman parte de la investigación integral que realiza la Fiscalía General del Estado de Michoacán para desarticular la estructura criminal responsable del asesinato del líder citricultor y del cobro sistemático de extorsiones al sector limonero de la región de Apatzingán.

De acuerdo con información de la Fiscalía General del Estado (FGE) Bravo fue hallado en el camino que conduce a la comunidad Los Tepetates. La dependencia estatal señaló en un breve comunicado publicado en redes sociales: “Llevamos a cabo actos de investigación por el homicidio de Bernardo Bravo Manríquez, presidente de la asociación de citricultores del Valle de Apatzingán”. Este pronunciamiento oficial confirma la intervención de la fiscalía michoacana en el caso del asesinato del dirigente agrícola.

El cuerpo del dirigente limonero tenía huellas de violencia y fueron los pobladores que circulaban por la zona quienes avisaron sobre el hallazgo a las autoridades. Este descubrimiento casual por parte de transeúntes permitió el inicio de las investigaciones que culminaron con la identificación y captura del presunto autor intelectual del homicidio durante los operativos realizados por fuerzas federales y estatales.

Bernardo Bravo era conocido por encabezar en los últimos meses manifestaciones debido a las extorsiones del crimen organizado contra el sector limonero. En febrero pasado había denunciado a través de redes sociales que había recibido amenazas de parte de grupos criminales, según documentaron las autoridades durante la investigación de su asesinato y las circunstancias que lo precedieron.

El líder citricultor había declarado en su perfil de Facebook: “Continuaremos solicitando a las autoridades avances en seguridad para que el delito de extorsión al limón termine”. Esta postura pública de denuncia contra las extorsiones lo había convertido en una figura visible de la resistencia civil pacífica contra el crimen organizado en la Tierra Caliente michoacana.

A finales de septiembre, Bravo denunció que él y sus compañeros estaban “permanentemente secuestrados” por las cuotas que les exige el crimen organizado por su cosecha. Esta declaración reflejaba la situación de vulnerabilidad que enfrentaban los productores de limón en la región ante la presión constante de grupos delictivos que controlan partes de la cadena de comercialización del cítrico.

En Apatzingán, el sector citrícola sufre extorsiones por Los Viagras y las organizaciones criminales autodenominadas como Los Blancos de Troya, Los Caballeros Templarios y el Cártel de Acahuato. Esta multiplicidad de grupos delictivos compitiendo por el control territorial y las fuentes de extorsión complica el panorama de seguridad para los productores agrícolas en el Valle de Apatzingán.

Michoacán es líder en producción de limón mexicano, con una cosecha anual que ronda las 700 mil toneladas del cítrico, que se obtienen en 67 mil hectáreas de 3 mil 504 productores. Esta importancia económica del sector citrícola explica el interés de grupos criminales por controlar mediante extorsiones una actividad que genera significativos flujos de dinero en la región de Tierra Caliente.

La detención de Rigoberto López Mendoza, alias “El Plátano”, representa un avance significativo en las investigaciones por el asesinato de Bernardo Bravo, aunque las autoridades continúan con operativos para localizar y capturar a otros posibles involucrados en el homicidio del líder de los citricultores. La fiscalía estatal mantiene abiertas múltiples líneas de investigación sobre el caso.

Los otros detenidos durante el operativo fueron trasladados a la ciudad de Morelia para su presentación ante el agente del Ministerio Público correspondiente, quien determinará su situación jurídica y su posible vinculación con el homicidio de Bernardo Bravo o con otras actividades delictivas relacionadas con las extorsiones al sector citrícola del Valle de Apatzingán.

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Filiberto Cruz

Filiberto Cruz