Nayib Bukele, presidente de El Salvador, sostuvo una conferencia de prensa con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en la Casa Blanca. Afirmó que no devolverá a Kilmar Ábrego García, hombre salvadoreño que fue deportado “por un error administrativo” de regreso a su país.
El presidente salvadoreño negó la posibilidad de devolver a Kilmar Ábrego y respondió los cuestionamientos de los periodistas diciendo “¿Cómo puedo devolver a un criminal a Estados Unidos? ¿Cómo puedo meter a un terrorista a Estados Unidos? ¡Claro que no lo voy a hacer! ¡La pregunta es ridícula!”.
También negó la posibilidad de dejarlo en libertad en El Salvador puesto a que lo describió como terrorista.
La semana pasada la Corte Suprema de Estados Unidos dictaminó que el gobierno de Donald Trump debía “facilitar” el regreso de Kilmar Ábrego al país. La fiscal general, Pam Bondi, comentó que la decisión del regreso del individuo dependía de El Salvador.
Kilmar Ábrego García fue deportado por un “error administrativo” a El Salvador, a pesar de que contaba con una orden de un juez de inmigración desde el 2019, en el que establecía que debía permanecer en Estados Unidos con el fin de preservar su seguridad.
El hombre vivía en Maryland con su esposa y un hijo cuando las autoridades lo arrestaron y le informaron que su “estatus migratorio había cambiado”. Por ello fue deportado sin presentar pruebas de nexos con el grupo criminal MS-13 al Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), el complejo carcelario de Nayib Bukele.
Durante la reunión de los dos mandatarios, el presidente estadounidense agradeció a su homólogo salvadoreño por aceptar a los migrantes criminales acusados de terrorismo. La megaprisión de El Salvador está siendo utilizada para retener a inmigrantes deportados a cambio de una tarifa de 6 millones de dólares por parte de Estados Unidos.
AS
Foto de portada: White House via X
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