Jéssica Luna, excandidata a la alcaldía del municipio de Yanga por el Partido del Trabajo (PT), fue asesinada a tiros por sujetos armados que viajaban a bordo de una camioneta blanca tipo Suburban, en un ataque que ocurrió este lunes en el estado de Veracruz. La mujer, quien compitió en las pasadas elecciones locales, falleció en el lugar del ataque después de que los agresores dispararan repetidamente contra su vehículo, el cual terminó sobre una jardinera mientras intentaba evadir la agresión.
De acuerdo con los reportes preliminares, los sujetos armados atacaron con ráfagas de disparos el automóvil en el que viajaba la excandidata política. Ante el ataque, Jéssica Luna intentó esquivar a sus agresores maniobrando su vehículo, pero durante la acción la unidad quedó varada sobre una jardinera. Malherida por los impactos de bala, la víctima mantuvo su pie en el acelerador en un intento por salir del sitio, pero aparentemente falleció en cuestión de minutos, ya que al llegar los servicios paramédicos al lugar de los hechos la declararon sin vida.
Jéssica Luna había participado como candidata del Partido del Trabajo en las pasadas elecciones para la alcaldía del municipio de Yanga, donde según los resultados oficiales perdió por un estrecho margen de apenas 52 votos frente a su contrincante del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Su incursión en la política local y la reciente contienda electoral forman parte del contexto que las autoridades investigarán para determinar los posibles motivos del crimen.
Tras el ataque, las autoridades de seguridad activaron de inmediato un “código rojo” de emergencia, movilizando cuerpos policiales de los tres niveles de gobierno –federal, estatal y municipal– hacia la zona del homicidio. Sin embargo, hasta el momento no se han reportado detenciones de presuntos responsables, y se desconoce el paradero de la camioneta blanca tipo Suburban en la que huían los agresores.
Este crimen se suma a una serie de hechos violentos registrados recientemente en el estado de Veracruz que han afectado a figuras políticas de distintos niveles, manteniendo en alerta a las autoridades electorales y de seguridad pública de la región. Las investigaciones continúan abiertas para identificar y capturar a los responsables del asesinato de la excandidata del PT.
