Miembros de la oposición acusan de militarización de la seguridad. La ley busca dar estructura militar a la GN.
El Pleno de la Cámara de Diputados aprobó, en lo general, con 349 votos a favor y 132 en contra la Ley de la Guardia Nacional, que pretende dotar al organismo de un carácter militar dependiente de la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena) tras trasladarla de la Secretaría de Seguridad.
Uno de los cuestionamientos más importantes de la ley era la posibilidad de que los militares obtengan una licencia especial que permita su participación para contender por cargos públicos de elección popular, así como otras actividades en dependencias gubernamentales. La presidenta Claudia Sheinbaum comentó durante la conferencia mañanera que eso era algo que ya estaba presente en la ley, incluyendo la Constitución de 1917.
Miembros de los partidos opositores acusaron que la ley pretende la militarización de la seguridad además de que fue catalogada como una “ley espía”, por presuntamente permitir a la Guardia Nacional participar en operaciones encubiertas. La diputada Laura Ballesteros de Movimiento Ciudadano presentó una moción suspensiva con el fin de detener la discusión, sin embargo, fue desechada por miembros de Morena en la votación.
El diputado Gibrán Ramírez de Movimiento Ciudadano acusó a la Ley de “sepultar” las posibilidades de tener una policía civil para reforzar una “policía militar”.
Mientras, legisladores afines a la 4T defendieron la ley y negaron que se tratara de una estrategia de militarización, sino de un intento de aumentar la seguridad para la población.
Foto de portada: CAROLINA JIMÉNEZ MARISCAL/CUARTOSCURO.COM