Una grieta de grandes dimensiones se formó en el bajopuente La Concordia, en la alcaldía Iztapalapa, a escasos metros del sitio donde hace 20 días se volcó una pipa de gas que provocó una explosión con múltiples víctimas. La abertura, que inicialmente fue reportada como un socavón, presenta medidas de 1.5 metros de radio, una proyección de agrietamiento de seis metros por una profundidad de dos metros, mientras que la trayectoria total de la fractura alcanza 138 metros de extensión, de acuerdo con informes técnicos de la alcaldía. Automovilistas que circulaban por el distribuidor vial fueron quienes alertaron a las autoridades sobre la aparición de la oquedad.
La grieta se localiza específicamente en el costado derecho de la curva, justo en la incorporación de la carretera Los Reyes hacia la autopista México-Puebla. Tras el reporte ciudadano, se realizó un recorrido de evaluación por parte de la alcaldesa de Iztapalapa, Aleida Alavez Ruiz, junto con personal especializado de la Secretaría de Gestión Integral del Agua, Protección Civil capitalina y las direcciones generales de Gobierno, de Servicios Urbanos y de Protección Civil de la demarcación. Las autoridades concluyeron que la afectación no corresponde a un socavón provocado por la ruptura de tuberías de agua o drenaje, sino a la trayectoria natural de escurrimientos pluviales que buscan cauce en esa zona.

El trazo de la grieta ya se encuentra registrado en el Plan de Riesgos que fue enviado previamente a las Secretarías de Gobierno y de Obras de la Ciudad de México, con el objetivo de que estas dependencias intervengan conforme al protocolo correspondiente. La primera evaluación técnica apunta a que esta falla geológica se activó debido a la tromba que cayó sobre la ciudad el pasado 27 de septiembre, cuyas intensas lluvias saturaron el suelo y buscaron caminos de escurrimiento natural. Como medida preventiva, el sitio permanece completamente acordonado para impedir el paso vehicular mientras se realizan los trabajos de análisis y reparación pertinentes.
Las autoridades de Iztapalapa emitieron una tarjeta informativa en la que detallaron las características de la grieta y las acciones emprendidas. En dicho documento, señalaron específicamente que el fenómeno “no tiene ninguna relación con los acontecimientos del pasado 10 de septiembre”, fecha en la que ocurrió el accidente y posterior explosión de la pipa de gas en el mismo puente de La Concordia que dejó un saldo de 31 personas fallecidas y numerosos lesionados. Esta aclaración busca evitar especulaciones que vinculen ambos incidentes, aunque su proximidad geográfica había generado inquietud entre la población.
El gobierno de la Ciudad de México emitió un comunicado oficial en el que informó que personal de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, y de la Secretaría de Gestión de Riesgos y Protección Civil arribó al lugar para evaluar la afectación vial y coordinar las medidas de seguridad correspondientes. Hasta el momento, no se han reportado incidentes o personas afectadas por la aparición de la grieta, gracias a la pronta intervención de las autoridades que implementaron el acordonamiento preventivo del área afectada. La zona permanecerá cerrada al tránsito vehicular hasta que se completen los estudios de suelo y se determine el método de reparación más adecuado.

La aparición de esta grieta geológica en Iztapalapa se suma a otros incidentes similares registrados recientemente en la misma demarcación, como el socavón en la colonia Porvenir que generó preocupación entre vecinos por el riesgo para sus viviendas y negocios. La recurrencia de estos fenómenos en la zona ha destacado la necesidad de mantener actualizados los planes de riesgo y contar con protocolos de actuación rápida para prevenir posibles afectaciones a la población. Las autoridades continúan con el monitoreo constante del área mientras se desarrolla el plan de intervención formal por parte de las secretarías competentes del gobierno capitalino.
