Una amenaza de bomba contenida en un mensaje anónimo provocó este lunes el desalojo preventivo de cientos de estudiantes de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, obligando a las autoridades universitarias a suspender las clases y a acordonar el edificio A mientras se realizan las labores de búsqueda del presunto artefacto explosivo. El incidente ocurre el mismo día en que se reanudaban las actividades presenciales en la facultad, luego del violento ataque con navaja que días atrás tuvo lugar en el Colegio de Ciencias y Humanidades plantel Sur de la misma universidad, donde un estudiante perdió la vida.
La amenaza fue descubierta en una hoja de papel pegada inside uno de los baños del edificio A de la facultad. El mensaje, dirigido explícitamente a las autoridades, advertía: “Encuentren la bomba que pusimos en uno de sus baños. No intenten averiguar quiénes somos. Esta no es una nota mal escrita en una hoja de cuaderno”. La naturaleza específica de la advertencia motivó la implementación inmediata del protocolo de seguridad, resultando en el acordonamiento completo de la zona afectada y la evacuación ordenada de todo el personal y alumnado presente en las instalaciones.
La suspensión de actividades en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales se decretó como medida preventiva en respuesta a la amenaza, interrumpiendo abruptamente el regreso a clases presenciales que estaba programado para este lunes. Este reinicio de labores académicas se había planeado después de un periodo de pausa por los hechos violentos ocurridos el pasado 22 de septiembre en las instalaciones del Colegio de Ciencias y Humanidades plantel Sur, ubicado en el Boulevard Cataratas de la colonia Jardines del Pedregal, en la alcaldía Coyoacán.
El incidente previo en el CCH Sur, que conmocionó a la comunidad universitaria, involucró un ataque con navaja que culminó con la muerte de un estudiante y lesiones graves para otro. Los hechos se desarrollaron cuando un alumno con capucha ingresó al plantel y agredió con un arma blanca a otro estudiante, provocándole heridas que le causaron la muerte. Un trabajador del colegio intervino forcejeando con el presunto agresor para intentar contenerlo, resultando lesionado durante el enfrentamiento y siendo trasladado de emergencia a un hospital para recibir atención médica especializada.
El posible responsable del ataque huyó inicialmente del lugar, pero al percatarse de que le estaban dando seguimiento, accedió a un edificio del plantel y se lanzó desde cierta altura, sufriendo fracturas en ambas piernas que requirieron su traslado urgente a un nosocomio para recibir tratamiento. Ante la gravedad de los hechos, las autoridades del plantel solicitaron formalmente la intervención de personal de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México para que realizara los servicios periciales correspondientes y las investigaciones necesarias para esclarecer los acontecimientos.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México acudió al reporte inicial de una persona lesionada en el CCH Sur, aunque debido a la naturaleza autónoma de la institución educativa, no se les permitió el acceso inmediato a las instalaciones, según informaron fuentes oficiales. Una vez en el lugar, elementos de la SSC establecieron un operativo perimetral para garantizar el resguardo del área mientras se realizaban las diligencias correspondientes por parte de los peritos ministeriales.
Actualmente, policías de la SSC mantienen custodia policial sobre el probable agresor en el hospital donde se encuentra internado, y se tiene previsto que lo pongan a disposición de las autoridades ministeriales una vez que reciba el alta médica correspondiente. El CCH Sur, como uno de los planteles educativos más importantes del sur de la Ciudad de México y perteneciente a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), cuenta con protocolos de seguridad establecidos que fueron activados inmediatamente después del ataque con navaja.
