El fabricante alemán de ropa deportiva Adidas ha emitido una disculpa pública tras ser acusado de apropiación cultural en el diseño de su nuevo calzado “Oaxaca Slip-On”. El modelo, diseñado por el estadounidense Willy Chavarría, está inspirado en las sandalias tradicionalmente usadas por los indígenas de Villa Hidalgo Yalálag, en el estado mexicano de Oaxaca, quienes no participaron en su producción. La empresa bávara reconoció en un comunicado la importancia del patrimonio artesanal de las comunidades indígenas mexicanas y ofreció reafirmar su compromiso de trabajar con Yalálag en un diálogo respetuoso.
“Adidas valora la riqueza cultural de las comunidades indígenas de México y la importancia de su patrimonio artesanal”, declaró la empresa en su comunicado oficial. “El Oaxaca Slip-On se inspiró en un diseño oaxaqueño arraigado en la tradición de Villa Hidalgo Yalálag. Ofrecemos disculpas públicas y reafirmamos nuestro compromiso de trabajar con Yalálag en un diálogo respetuoso que honre su patrimonio cultural”. El caso generó tal impacto que llegó a la atención de la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, quien calificó el diseño del zapato como una “apropiación cultural inapropiada”.

La presidenta Sheinbaum afirmó: “Las grandes empresas están apropiándose de productos, ideas y diseños de las comunidades indígenas de nuestro país. Eso es propiedad intelectual”. El gobernador de Oaxaca, Salomón Jara, se sumó a las críticas a través de redes sociales, declarando que “los huaraches de Yalálag forman parte del patrimonio cultural de esta comunidad, una tradición que se ha transmitido de generación en generación y refleja su identidad”. Añadió que “este patrimonio es uno de nuestros mayores tesoros y no debemos permitir que se trate como una mercancía”.
México cuenta desde 2022 con una ley específica para proteger la propiedad intelectual y cultural de los pueblos indígenas y afromexicanos. Esta legislación establece que el uso no autorizado de estos elementos culturales se castiga con multas e incluso penas de prisión. La ley fue creada precisamente para prevenir casos como el ocurrido con Adidas, donde empresas internacionales utilizan diseños tradicionales sin la debida autorización o participación de las comunidades originarias.

Willy Chavarría, exvicepresidente sénior de diseño de Calvin Klein y responsable del diseño del calzado, expresó su profunda tristeza por la situación. Chavarría manifestó: “La intención siempre fue honrar el poderoso espíritu cultural y artístico de Oaxaca y sus comunidades creativas, un lugar cuya belleza y resistencia me han inspirado. Esto no refleja el respeto y la colaboración que Oaxaca, Villa Hidalgo Yalálag y su gente merecen”. Reconoció específicamente que el diseño no fue desarrollado en colaboración directa y significativa con la comunidad oaxaqueña.
El caso del “Oaxaca Slip-On” de Adidas ha reavivado el debate internacional sobre la apropiación cultural versus la apreciación cultural en la industria de la moda. Mientras las disculpas públicas de la empresa alemana han sido recibidas como un primer paso, organizaciones defensoras de los derechos indígenas exigen medidas concretas que incluyan compensación económica para las comunidades afectadas y la establecimiento de colaboraciones genuinas que respeten los derechos de propiedad intelectual colectiva. La resolución de este caso podría sentar un precedente importante para la protección del patrimonio cultural indígena a nivel global.