La capital sinaloense vivió una nueva ola de violencia este miércoles 23 de octubre que dejó diez personas sin vida en distintos puntos de la ciudad en menos de 24 horas, con una serie de ataques armados, ejecuciones y agresiones que mantuvieron en alerta a la población y que se registraron luego de la captura por parte del gobierno federal de una célula de Los Chapitos.
La primera alerta se registró a las 8:15 de la mañana cuando un grupo armado incendió una residencia en el fraccionamiento Colinas de San Miguel. Los responsables llegaron a bordo de un vehículo Nissan Sentra, modelo antiguo, y tras rociar el inmueble con combustible, le prendieron fuego. Aunque no se reportaron personas heridas en este incidente inicial, marcó el comienzo de una jornada violenta que se extendería por toda la ciudad.

Minutos después, a las 9 de la mañana, se confirmó el fallecimiento de Jesús Alberto, de 56 años, uno de los cinco lesionados durante las balaceras ocurridas el martes 21 de octubre en la salida norte de la ciudad, conectando así la violencia de días anteriores con los nuevos episodios del miércoles.
Más tarde, a las 11:30 de la mañana, fue localizado un cuerpo con impactos de bala en un terreno baldío sobre la avenida Urales Norte, entre el Libramiento Benito Juárez (La Costerita) y el fraccionamiento Villa Bonita. La víctima presentaba las manos atadas hacia atrás, y junto a ella fue encontrada una cartulina con un mensaje cuyo contenido no ha sido revelado por las autoridades investigadoras.
A las 12:30 del mediodía, una mujer identificada como Manuela, de 65 años, fue asesinada a balazos dentro de su domicilio en la sindicatura de Aguaruto. Los agresores lograron huir del lugar sin que se reportara su captura inmediata, dejando a la comunidad en estado de conmoción por el asesinato de una persona de la tercera edad dentro de su propia vivienda.
Horas más tarde, a las 3:10 de la tarde, se reportó otro ataque armado en un inmueble situado sobre la avenida García Icazbalceta, entre José Rosas Moreno y Torre de la Paz, frente al fraccionamiento Las Torres y a tan solo 400 metros de la Secretaría de Seguridad y Tránsito Municipal. En el sitio dos hombres fueron ejecutados con ráfagas de arma larga, evidenciando la audacia de los agresores al actuar cerca de las instalaciones de las autoridades de seguridad.
Casi de forma simultánea, a las 3:30 de la tarde, en el sector Gustavo Díaz Ordaz, fue asesinado César Alejandro, de 30 años, tras ser interceptado por sujetos armados que dispararon contra su automóvil, provocando su muerte instantánea mientras circulaba por las calles de la ciudad.
Finalmente, a las 4:15 de la tarde, se registró otro ataque a balazos sobre el bulevar Francisco I. Madero, cerca de la avenida Vicente Guerrero, en la zona conocida como “Las bandas y mariachis”, a unos metros del bar Kz4. Dos hombres que viajaban en motocicleta abrieron fuego, dejando un muerto y un herido. El fallecido fue identificado extraoficialmente como Sergio, alias “El Checo”, mientras que Israel Alonso, de 30 años, originario de Morelos, resultó herido y logró escapar, sin que hasta el momento se conozca su paradero ni su estado de salud.
La violencia continuó durante la noche cuando a las 9:30, dos hermanos fueron asesinados a balazos cuando convivían en el interior de una vivienda ubicada en la colonia Lomas de Tamazula al nororiente de Culiacán. De acuerdo a la SSP, el ataque armado ocurrió sobre la avenida Sanalona o Segunda, entre las calles Galileo y Venus, cuando sujetos armados arribaron al sitio a bordo de un vehículo, del cual descendieron e ingresaron por la fuerza al inmueble y dispararon contra las víctimas identificadas como Julián y Trinidad.
Alrededor de las 11 de la noche del miércoles, un hombre joven fue ejecutado a balazos tras ser perseguido por los ocupantes de una camioneta Jeep Cherokee color oscuro, en un tramo de la carretera a Culiacancito, al poniente de Culiacán. La víctima circulaba a bordo de una motocicleta Italika cuando fue alcanzada por los agresores, quienes abrieron fuego con armas de grueso calibre en repetidas ocasiones. Versiones preliminares indican que el hombre intentó repeler la agresión con un arma de fuego, lo que habría provocado que los atacantes perdieran el control de la camioneta y se estrellaran contra un árbol a la orilla de la carretera. El motociclista cayó herido de gravedad junto a su unidad y murió de manera instantánea a consecuencia de los impactos de bala, mientras que en el lugar quedó abandonada la camioneta de los agresores, con visibles daños por el choque.





