La ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, ofreció este martes su discurso final ante el pleno del máximo tribunal del país durante una sesión extraordinaria, la última de la actual Sala Superior, donde aseguró que la historia juzgará a quienes llegaron a juzgar.
En su intervención, Piña expresó reconocimiento y gratitud a cada uno de los ministros y ministras que integraron el pleno y el tribunal, marcando el cierre de un ciclo fundamental de la vida pública mexicana que inició hace poco más de 30 años, previo a que el próximo 1 de septiembre tomen protesta los nuevos integrantes de la Corte elegidos mediante elección.

“La Suprema Corte ha recorrido un largo camino para construir su legitimidad. No me corresponde a mí valorar en qué medida ese objetivo se alcanzó. Serán nuestras sentencias las que darán cuenta de ello. Será la sociedad y la historia misma, las que juzgarán a quienes hemos juzgado”, señaló la ministra presidenta durante su alocución en el Salón de Plenos. Destacó que esta historia se ha escrito con debates intensos, disensos fecundos y consensos que, lejos de aplacar la diversidad, han fortalecido el núcleo de la democracia mexicana, describiendo el momento actual como cargado de memoria y futuro.
Piña enfatizó la necesidad de reconocer el papel de la Suprema Corte como el máximo tribunal constitucional que ha buscado garantizar la progresividad de los derechos humanos, calificándolo como “la piedra angular de la justicia constitucional, el máximo garante del ordenamiento jurídico nacional y un bastión en la defensa de la democracia y las libertades de todas las personas”. La ministra presidenta también reconoció la labor del personal jurisdiccional, administrativo y operativo de la corte, sosteniendo que sin sus labores el tribunal no podría funcionar y que su trabajo cotidiano constituye el legado institucional.
“Mientras existan mujeres y hombres dispuestas a defender la justicia con integridad, este país tendrá un horizonte de dignidad y de libertad. La ley fundamental ilumina este horizonte. La Constitución debe seguir siendo esa brújula moral que nos guíe, no como un libro viejo, sino como un pacto que exige renovar la lealtad cada día”, afirmó Piña durante su discurso. Concluyó señalando que “la congruencia, la ética, el trabajo y la perseverancia, la excelencia de honradez y la dignidad son y serán la mejor carta de presentación ante el escrutinio de la historia”.
La sesión inició a las 12:28 horas cuando la ministra presidenta dio el malletazo para comenzar la última sesión del Máximo Tribunal en su actual época. Previamente, trabajadores del organismo se formaron en el pasillo de ingreso para aplaudir al paso de las y los integrantes del Pleno, excepto a la ministra Lenia Batres Guadarrama, cuyo paso fue acompañado por el silencio de los integrantes de diferentes ponencias. Al término del discurso de Norma Piña, todos los ministros presentes aplaudieron excepto Batres Guadarrama, quien se abstuvo de sumarse al reconocimiento.
Norma Piña convocó a las ministras y ministros para el próximo 26 de agosto, donde los presidentes de las Salas, Loretta Ortiz Ahlf y Javier Laynez Potisek, rendirán un informe sobre sus gestiones. Al término de estas presentaciones, la presidenta de la Corte también rendirá su informe final, cerrando formalmente este período histórico de la Suprema Corte de Justicia de la Nación antes de la transición hacia la nueva integración del máximo tribunal mexicano.