La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTBS) de Estados Unidos clasificó como “siniestro marítimo grave” el impacto del Buque Escuela Velero Cuauhtémoc de la Armada de México contra el puente de Brooklyn, ocurrido el 17 de mayo a las 20:24 horas durante maniobras de zarpe desde el muelle 17 de Manhattan. El incidente dejó dos marinos muertos y 19 heridos, además de daños menores en la estructura del puente y el velero, según reveló el informe preliminar difundido ayer por las autoridades estadounidenses y confirmado por la Secretaría de Marina (Semar).
Detalles técnicos del accidente
El documento, de carácter público pero sujeto a modificaciones, especifica que el control del buque durante la maniobra estuvo a cargo de dos prácticos estadounidenses y un remolcador local, según protocolos para navegación en aguas neoyorquinas. En el momento del impacto, el Cuauhtémoc —con 277 personas a bordo entre cadetes y tripulación— realizaba movimientos de rotación asistidos cuando colisionó con uno de los pilares del icónico puente.
La NTBS enfatizó que el informe no atribuye responsabilidades en esta fase, centrándose en factores técnicos como:

- El funcionamiento de los sistemas de propulsión y gobierno del velero.
- Los protocolos operativos aplicados durante la maniobra.
- La capacitación del personal involucrado.
Postura de la Armada de México
En comunicado oficial, la Semar reiteró su colaboración plena con la investigación y destacó que mantiene dos equipos especializados en Nueva York:
- Ingenieros navales para evaluar daños en el buque.
- Asesores jurídicos para seguimiento legal del caso.

“El Buque Cuauhtémoc conserva su integridad estructural y los daños reportados no comprometen su navegabilidad”, afirmó la dependencia, añadiendo que el velero permanecerá en dique seco para reparaciones mayores antes de reintegrarse a sus actividades formativas.
Implicaciones legales y próximos pasos
Bajo la legislación estadounidense, la clasificación de “siniestro grave” obliga a una investigación exhaustiva que podría extenderse por 12 a 18 meses. Expertos consultados señalan tres líneas de análisis críticas:
Factores humanos:
La experiencia de los prácticos —contratados localmente para guiar la salida del puerto— será examinada, junto con posibles errores de comunicación entre la tripulación mexicana y los especialistas estadounidenses.
Condiciones ambientales:
Registros meteorológicos indican vientos de 18 nudos y marejada moderada al momento del incidente, variables que serán incorporadas al modelo de reconstrucción digital que prepara la NTBS.
Responsabilidades compartidas:
Aunque el informe preliminar exime a la Semar de señalamientos directos, la NTBS podría emitir recomendaciones sobre protocolos binacionales para maniobras de buques extranjeros en puertos estadounidenses.
Reacciones y contexto
El alcalde de Nueva York, Eric Adams, expresó sus condolencias por las víctimas pero aseguró que “el puente de Brooklyn sigue siendo seguro” tras evaluaciones estructurales realizadas por el Departamento de Transporte. Mientras, familiares de los marinos fallecidos exigieron transparencia total en la investigación.
El Cuauhtémoc, botado en 1982 y con capacidad para 90 cadetes, es emblemático por representar a México en eventos internacionales como la Regata Velas Latinoamérica. Este incidente marca el accidente más grave en sus 43 años de historia operativa.